AMAR EN LIBERTAD, LIBRE DE APEGOS
El apego es el resultado de buscar la felicidad en otra persona. Eso sucede con mucha frecuencia ya que gran parte de la educación y la cultura ha estado centrada en encontrar “alguien” que nos complete, cosa que en la práctica es imposible. Esa búsqueda del amor y la plenitud fuera de nosotros mismos solo nos lleva a vivir con miedo al abandono, al engaño y a la pérdida.
Tener pareja no significa poner tu existencia a girar en torno a otra persona, es vital mantener tu individualidad, respetar los espacios y que cada uno trabaje por alcanzar sus propias metas, teniendo una actitud de entrega y compromiso hacia la relación. Solo encontrando tu propia felicidad tienes algo realmente bueno para compartir con tu compañero/a, con tus hijos, tus padres y el mundo entero.
“Amor y apego son cosas distintas, una produce felicidad y la otra sufrimiento. Existe una diferencia entre ‘amar’ y ‘depender’ de alguien”.
¿Por qué nos apegamos?
El apego ocurre cuando se rompe el equilibrio entre nuestra autoestima y el amor por el otro, a partir de ese momento la relación comienza a tener dificultades. Se empieza a ver amenazas en cualquier situación o persona pues no estamos enfocados en disfrutar y compartir, sino en retener y asegurarnos de que nuestro ser amado nunca nos deje. Es por eso que los celos constantes son un indicador de apego afectivo.
Cuando se valora a la otra persona más que a sí mismo, se está más apegado que enamorado.
El apego también se manifiesta cuando la persona se siente incapaz de dejar una relación donde existe maltrato físico y/o verbal o situaciones repetitivas que afectan su salud emocional, ya que el miedo a la soledad no le permite tomar decisiones frente a la relación.
4 Claves para superar el apego afectivo
1. Enamórate de ti
Inconscientemente atraemos a nuestra vida no a las personas que se ajustan a lo que queremos, sino a quienes vibran en la misma frecuencia; de manera que si te falta amor por ti, sólo atraerás personas que puedan darte la misma pobre calidad de amor que tú te das. Reconoce todas las fortalezas que tienes y siéntete una persona capaz y merecedora del amor.
2. Desarrolla tu proyecto de vida
Dedica tiempo a fortalecer tu carrera, tus proyectos, tu salud. Es difícil amar a alguien a quien no admiramos, por eso no es bueno poner tu vida a girar en torno a los proyectos y sueños de otra persona, así sea alguien importante para ti. Desarrolla las actividades que te hagan sentir plenitud y autorrealización.
Si tu propia vida no te satisface no vas a tener mucho para aportar a otro, sino mucho que demandarle.
3. Expande tu círculo social
Comparte con tu familia y amigos, inscríbete en cursos, grupos de ayuda social o alguna actividad artística y llena tu vida de personas que alegren tu corazón. Entre más te ames y más te des cuenta de lo mucho que la gente te valora, menos vas a sentir que necesitas a tu pareja para poder respirar. Además, si tienes espacios que disfrutas sanamente, fácilmente aceptarás que tu pareja tenga los suyos.
4. Cultiva tu crecimiento personal
Sanar tu historia, conocerte más a fondo y fortalecer tus habilidades para comunicarte y construir relaciones positivas, te brinda más herramientas para amar con entrega y libertad.
Por: Gloria Cecilia Ramírez G.
Psicóloga, conferencista y Directora de Escuela de Vida
