Comparte con el mundo lo mejor de ti
En el interior reside todo el potencial, la seguridad, el amor y la fortaleza para avanzar en la vida irradiando la grandeza de nuestro Ser. Es como una semilla que contiene todo lo necesario para que el árbol crezca y de sus frutos; sin embargo, para que esto suceda se requiere contar con el abono, el cuidado y el alimento necesario. De igual manera podemos facilitar que surja lo mejor de nosotros mismos o por el contrario ocultarlo con capas de miedos, resentimientos y complejos. Aquí conocerás cómo cultivar tu belleza interior para convertirte en la mejor versión de ti mismo:
- Libérate del exceso de equipaje: Suelta el dolor o la carga frente a situaciones del pasado que fueron difíciles eligiendo comprender en lugar de juzgar. El perdón es lograr ver de otra manera, reconociendo que detrás de todo ataque existe una persona herida o confundida. Esto no quiere decir permitir, sino tomar decisiones desde la paz y no desde la rabia. Aprender a perdonar embellece, ya que la amargura y el dolor se reflejan en el lenguaje no verbal, en los gestos, en la expresión del rostro y apaga la vitalidad. He tenido la fortuna de acompañar el proceso de sanación emocional de muchas personas que después de esto, han compartido que los demás las ven más bellas y con la mirada más brillante.
- Sonríe durante al menos un minuto en la mañana: Esto incrementa los niveles de serotonina en tu cuerpo y es un poderoso antidepresivo. Además la sonrisa ilumina el rostro, libera tensiones y permite que se expanda la alegría más abiertamente.
- Realiza decretos de poder: En lugar de centrar la mente en quejas, preocupaciones o críticas contra ti mismo, enfócate en aquello que quieres crear. Sé flexible y amoroso ante las equivocaciones, toma el aprendizaje y trátate con amor. Cada día puedes entrenar tu mente observándola y soltando los pensamientos que te alejan de tu paz. Puedes escribir en un papel o en tu celular estos decretos de poder:
Me amo y me acepto tal como soy
Expando mi belleza interior a donde quiera que voy
Yo soy esencia de amor, seguridad y alegría
Soy flexible y tolerante conmigo mismo y con los demás
Elijo comprender en lugar de juzgar
Creo en mí. Avanzo por la vida con confianza
Agradezco, bendigo y valoro cada instante de la vida
- Amate por lo que eres, más allá de lo que tienes y haces: Cultivar el silencio interior y la relajación es una buena práctica para conectarte con tu Ser, soltando tensiones y reconociendo que tu valor ya está dado sólo por existir. “No soy lo suficientemente bueno”, “el amor hay que ganárselo”, “Cuanto tienes, cuanto vales” son frases que nos alejan de creer y confiar en todo lo bueno que hay en el interior para compartir con los demás.
- Céntrate en reconocer la belleza interior de los demás: Las personas que están a nuestro alrededor son espejos que nos reflejan nuestra luz y también nuestra sombra, es decir aquello que podemos continuar trabajando en nosotros mismos. En oriente existen diversas prácticas para desarrollar la visión espiritual, aquella donde te centras en mirar más allá de lo físico y de los aspectos de la personalidad, para lograr reconocer la esencia de Amor y luz que hay en el interior de todos los seres. Cuando logras ver la belleza interior en los demás es una señal de que también la reconoces en ti.
Como decía Carl Jung: “Sólo se volverá clara tu visión cuando mires hacia tu propio interior, porque quien mira hacia afuera sueña y quien mira hacia adentro despierta”. La belleza interior se expande cuando disponemos la mente y el corazón a vibrar con alegría, amor, perdón y gratitud.
Gloria Cecilia Ramírez G.
Conferencista, escritora y conferencista
